Eduardo Domínguez Sánchez
¡Qué tremendo contraste se observó en la designación de candidatos a la gubernatura de Tabasco entre el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Mientras que los primeros, entre quienes aspiraban —Adán Augusto López Hernández y su hermana Rosalinda, Oscar Cantón Zetina y Arturo Núñez Jiménez— y la dirigencia nacional y estatal perredista dialogaron y se pusieron de acuerdo acerca del método de elección que fue por encuesta, la que favoreció al senador con licencia Arturo Núñez Jiménez, los del tricolor armaron un verdadero desastre en detrimento de su propio instituto político, al convenir acuerdos y no respetarlos, burlarse de la militancia, manejar doble discurso y seguir con la simulación; con todo eso, el Revolucionario Institucional ya tiene candidato a gobernador y es el ex alcalde de Centro, Jesús Alí de la Torre.
Por un lado, los del PRD demostraron ser disciplinados, privilegiaron la unidad en torno a su partido, actuaron con método y mostraron oficio político, mientras que los priistas, con toda la experiencia que este partido tiene en cuestiones electorales, enseñaron muy feo “el cobre”; con sus actitudes le dijeron a la militancia y a todos los tabasqueños que quienes importan realmente son ellos mismos (los aspirantes) y los grupos políticos a los que pertenecen; no les importa su partido y mucho menos su militancia; no les importa Tabasco.
Los aspirantes priistas a la gubernatura de Tabasco: Luis Felipe Graham Zapata, Georgina Trujillo Zentella, Jesús Alí de la Torre, Evaristo Hernández Cruz, Francisco Herrera León, Nicolás Bellizia Aboaf, Jaime Mier y Terán Suárez y Florizel Medina Pereznieto, no pudieron ponerse de acuerdo para sacar de entre ellos a un candidato de unidad y junto con los desaciertos del dirigente nacional, Pedro Joaquín Coldwell, quien primero reveló que la encuesta favorecía a Luis Felipe Graham Zapata, luego que había un empate con éste y Jesús Alí, para que finalmente se decidieran por el ex edil.
Como quiera que sea, los tres principales partidos políticos con presencia real en la entidad ya tienen candidato: Jesús Alí de la Torre por el PRI; Arturo Núñez Jiménez por el PRD y Gerardo Priego Tapia por el Partido Acción Nacional (PAN).
Es necesario apuntar algo: en la designación de sus respectivos candidatos a gobernador, los tres partidos políticos no fueron capaces de practicar la democracia, puesto que ninguno permitió a sus militantes y simpatizantes que fueran ellos, mediante el voto directo y secreto, quienes eligieran al mejor priista, perredista o panista para que fuera su abanderado en la próxima contienda por la gubernatura a celebrarse el 1 de julio próximo.
Los tres partidos le tuvieron miedo a la democracia. Entonces, ¿cómo es que durante la campaña en sus discursos van a hablar de democracia, cuando ellos —los candidatos—, no surgieron de un proceso abierto?
Lo cierto es que esta contienda se prevé que será tal vez la más reñida de toda la historia y en la cual, por primera vez, la oposición tiene posibilidades reales de arrancarle el poder al PRI, si es que hacia el interior de este partido la “operación cicatriz” no se hace pronto y con buenos “galenos”, ya que el PRD cuenta con un buen candidato que no solamente aglutina a los militantes de su partido, sino que también tiene amigos y simpatizantes de su antiguo instituto político, el PRI, me refiero al ex priista Arturo Núñez Jiménez.
Si el PRI quiere conservar el poder en Tabasco deberá echar mano de toda su experiencia política, escoger a sus mejores operadores para que entre los grupos que participaron en ese proceso interno para elegir al candidato a gobernador se limen asperezas, se hagan acuerdos políticos serios, se repartan bien el “pastel” y se haga conciencia que solamente trabajando en unidad se puede alcanzar la victoria el domingo 1 de julio…
Además de todo lo anterior, el PRI y sus dirigentes ya no pueden seguir cometiendo los mismos errores que en la designación del candidato a gobernador, sobre todo ahora que tendrán que elegir a sus abanderados a presidente municipal y diputado local en los 17 municipios.
Es imprescindible que ya no haya más confrontaciones hacia el interior del priismo, por lo tanto, Miguel Alberto Romero Pérez, dirigente estatal del PRI, deberá tener mucho cuidado en respetar el sentir popular en los 17 municipios, acuérdese que los procesos locales despiertan en el tabasqueño mucha pasión y entonces se tiene que respetar la decisión de las mayorías y esto podría hacerse a través de una consulta a las bases; de lo contrario, las consecuencias podrían ser desastrosas para la nave tricolor…
Y en lo que respecta a la grilla local, el comité municipal del PRI en Paraíso, que encabeza Victoria Bonfil Sánchez, ha detectado que hay 22 aspirantes para la alcaldía y diputación local, lo que nos hace pensar que esto ya se volvió un desastre, que ya cualquiera sin tener los méritos ni la experiencia, mucho menos la preparación académica, quiere gobernar en el municipio.
No entienden que la política es una carrera que requiere de mucho esfuerzo, de preparación, de militancia, servicio; no es nada más de llegar y que a la primera se les dé un puesto de elección popular. No es así. Primero hay que picar piedras, ganarse las simpatías de los ciudadanos, conocer la problemática de la comuna y presentar proyectos viables que contribuyan al verdadero desarrollo del municipio.
El caso es que del montón de suspirantes priistas que buscan el hueso mayor podría salir la fórmula que contenderá en las próximas elecciones para presidente municipal y diputado local. Pero ¿quiénes son estos precandidatos? Son bastantes, pero los que tienen mayores posibilidades de alcanzar la candidatura a edil son: Sebastián Santos Pérez, presidente de los copreros; el Químico Pedro Jesús Salazar Collado, presidente de la Asociación Civil “Generación Revolucionaria Luis Donaldo Colosio” y catedrático del Cobatab; Luis Andrés Domínguez Alejandro, rector de la Universidad Politécnica del Golfo de México (UPGM); el profesor Jorge Alberto Carrillo Jiménez, ex director de la Decur en el ayuntamiento de Centro; Carlos Mario de la Cruz Alejandro, ex dirigente del comité municipal del PRI; el abogado Víctor Jesús Sevilla Castillo; el ex diputado Jesús Alejandro Almeida; el ex alcalde y ex diputado Luis Arturo de la Fuente Sánchez, entre otros.
En tanto que para la diputación local los aspirantes son: Abigail Pérez Jiménez, Ángel Ocaña Flores, el ex edil Ciro Burelo Magaña, y la profesora Jacinta Cruz de la Cruz, entre otros.
Se sabe que por parte del PRD, los precandidatos a la presidencia municipal son: el actual diputado local Bernardo Barrada Ruiz y el ex edil Jorge Andrés García Fernández. Para la diputación local, de acuerdo a las encuestas, quien va a la cabeza es el doctor Carlos Josué Gil Torres, ex secretario del Ayuntamiento, aunque también aspira el ex director de Tránsito municipal, Sergio Montalvo Hernández, y el ex alcalde interino Héctor López.
Por el Partido Acción Nacional (PAN) fuentes extraoficiales, informan que el candidato a la alcaldía paraiseña será Miguel Ángel Gamboa Bartilotti y para diputado local el actual regidor panista del Ayuntamiento paraiseño, Miguel Guzmán.
Envíe sus comentarios al correo: lae_dominguez08@hotmail.com
¡Qué tremendo contraste se observó en la designación de candidatos a la gubernatura de Tabasco entre el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Mientras que los primeros, entre quienes aspiraban —Adán Augusto López Hernández y su hermana Rosalinda, Oscar Cantón Zetina y Arturo Núñez Jiménez— y la dirigencia nacional y estatal perredista dialogaron y se pusieron de acuerdo acerca del método de elección que fue por encuesta, la que favoreció al senador con licencia Arturo Núñez Jiménez, los del tricolor armaron un verdadero desastre en detrimento de su propio instituto político, al convenir acuerdos y no respetarlos, burlarse de la militancia, manejar doble discurso y seguir con la simulación; con todo eso, el Revolucionario Institucional ya tiene candidato a gobernador y es el ex alcalde de Centro, Jesús Alí de la Torre.
Por un lado, los del PRD demostraron ser disciplinados, privilegiaron la unidad en torno a su partido, actuaron con método y mostraron oficio político, mientras que los priistas, con toda la experiencia que este partido tiene en cuestiones electorales, enseñaron muy feo “el cobre”; con sus actitudes le dijeron a la militancia y a todos los tabasqueños que quienes importan realmente son ellos mismos (los aspirantes) y los grupos políticos a los que pertenecen; no les importa su partido y mucho menos su militancia; no les importa Tabasco.
Los aspirantes priistas a la gubernatura de Tabasco: Luis Felipe Graham Zapata, Georgina Trujillo Zentella, Jesús Alí de la Torre, Evaristo Hernández Cruz, Francisco Herrera León, Nicolás Bellizia Aboaf, Jaime Mier y Terán Suárez y Florizel Medina Pereznieto, no pudieron ponerse de acuerdo para sacar de entre ellos a un candidato de unidad y junto con los desaciertos del dirigente nacional, Pedro Joaquín Coldwell, quien primero reveló que la encuesta favorecía a Luis Felipe Graham Zapata, luego que había un empate con éste y Jesús Alí, para que finalmente se decidieran por el ex edil.
Como quiera que sea, los tres principales partidos políticos con presencia real en la entidad ya tienen candidato: Jesús Alí de la Torre por el PRI; Arturo Núñez Jiménez por el PRD y Gerardo Priego Tapia por el Partido Acción Nacional (PAN).
Es necesario apuntar algo: en la designación de sus respectivos candidatos a gobernador, los tres partidos políticos no fueron capaces de practicar la democracia, puesto que ninguno permitió a sus militantes y simpatizantes que fueran ellos, mediante el voto directo y secreto, quienes eligieran al mejor priista, perredista o panista para que fuera su abanderado en la próxima contienda por la gubernatura a celebrarse el 1 de julio próximo.
Los tres partidos le tuvieron miedo a la democracia. Entonces, ¿cómo es que durante la campaña en sus discursos van a hablar de democracia, cuando ellos —los candidatos—, no surgieron de un proceso abierto?
Lo cierto es que esta contienda se prevé que será tal vez la más reñida de toda la historia y en la cual, por primera vez, la oposición tiene posibilidades reales de arrancarle el poder al PRI, si es que hacia el interior de este partido la “operación cicatriz” no se hace pronto y con buenos “galenos”, ya que el PRD cuenta con un buen candidato que no solamente aglutina a los militantes de su partido, sino que también tiene amigos y simpatizantes de su antiguo instituto político, el PRI, me refiero al ex priista Arturo Núñez Jiménez.
Si el PRI quiere conservar el poder en Tabasco deberá echar mano de toda su experiencia política, escoger a sus mejores operadores para que entre los grupos que participaron en ese proceso interno para elegir al candidato a gobernador se limen asperezas, se hagan acuerdos políticos serios, se repartan bien el “pastel” y se haga conciencia que solamente trabajando en unidad se puede alcanzar la victoria el domingo 1 de julio…
Además de todo lo anterior, el PRI y sus dirigentes ya no pueden seguir cometiendo los mismos errores que en la designación del candidato a gobernador, sobre todo ahora que tendrán que elegir a sus abanderados a presidente municipal y diputado local en los 17 municipios.
Es imprescindible que ya no haya más confrontaciones hacia el interior del priismo, por lo tanto, Miguel Alberto Romero Pérez, dirigente estatal del PRI, deberá tener mucho cuidado en respetar el sentir popular en los 17 municipios, acuérdese que los procesos locales despiertan en el tabasqueño mucha pasión y entonces se tiene que respetar la decisión de las mayorías y esto podría hacerse a través de una consulta a las bases; de lo contrario, las consecuencias podrían ser desastrosas para la nave tricolor…
Y en lo que respecta a la grilla local, el comité municipal del PRI en Paraíso, que encabeza Victoria Bonfil Sánchez, ha detectado que hay 22 aspirantes para la alcaldía y diputación local, lo que nos hace pensar que esto ya se volvió un desastre, que ya cualquiera sin tener los méritos ni la experiencia, mucho menos la preparación académica, quiere gobernar en el municipio.
No entienden que la política es una carrera que requiere de mucho esfuerzo, de preparación, de militancia, servicio; no es nada más de llegar y que a la primera se les dé un puesto de elección popular. No es así. Primero hay que picar piedras, ganarse las simpatías de los ciudadanos, conocer la problemática de la comuna y presentar proyectos viables que contribuyan al verdadero desarrollo del municipio.
El caso es que del montón de suspirantes priistas que buscan el hueso mayor podría salir la fórmula que contenderá en las próximas elecciones para presidente municipal y diputado local. Pero ¿quiénes son estos precandidatos? Son bastantes, pero los que tienen mayores posibilidades de alcanzar la candidatura a edil son: Sebastián Santos Pérez, presidente de los copreros; el Químico Pedro Jesús Salazar Collado, presidente de la Asociación Civil “Generación Revolucionaria Luis Donaldo Colosio” y catedrático del Cobatab; Luis Andrés Domínguez Alejandro, rector de la Universidad Politécnica del Golfo de México (UPGM); el profesor Jorge Alberto Carrillo Jiménez, ex director de la Decur en el ayuntamiento de Centro; Carlos Mario de la Cruz Alejandro, ex dirigente del comité municipal del PRI; el abogado Víctor Jesús Sevilla Castillo; el ex diputado Jesús Alejandro Almeida; el ex alcalde y ex diputado Luis Arturo de la Fuente Sánchez, entre otros.
En tanto que para la diputación local los aspirantes son: Abigail Pérez Jiménez, Ángel Ocaña Flores, el ex edil Ciro Burelo Magaña, y la profesora Jacinta Cruz de la Cruz, entre otros.
Se sabe que por parte del PRD, los precandidatos a la presidencia municipal son: el actual diputado local Bernardo Barrada Ruiz y el ex edil Jorge Andrés García Fernández. Para la diputación local, de acuerdo a las encuestas, quien va a la cabeza es el doctor Carlos Josué Gil Torres, ex secretario del Ayuntamiento, aunque también aspira el ex director de Tránsito municipal, Sergio Montalvo Hernández, y el ex alcalde interino Héctor López.
Por el Partido Acción Nacional (PAN) fuentes extraoficiales, informan que el candidato a la alcaldía paraiseña será Miguel Ángel Gamboa Bartilotti y para diputado local el actual regidor panista del Ayuntamiento paraiseño, Miguel Guzmán.
Envíe sus comentarios al correo: lae_dominguez08@hotmail.com
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